¿Qué son las tres “P” de Moisés Naím y por qué deberíamos conocerlas?


¿Qué son las tres “P” de Moisés Naím y por qué deberíamos conocerlas? 

Populismo, polarización y posverdad, estos tres elementos juntos constituyen el peor enemigo de la política, la diplomacia y los contrapesos de las instituciones. 

A lo largo de la historia, los ciudadanos han experimentado diferentes formas de alcanzar el poder, desde las arremetidas por la fuerza, hasta la distinción divina. 

Una vez alcanzado, éste pasaba a ser heredado o transferido como si se tratase de un bien. Había algo muy común en aquel entonces, nadie podía poner en duda su autoridad, si lo hacía, era bienvenido a la horca o quizá a cosas peores. 

En este sentido, la historia nos ha demostrado que el poder ilimitado solo alimenta las ambiciones de pocos, haciendo sufrir a muchos, permitiendo así que se cometan delitos atroces sin que éstos, debidamente, sean ajusticiados. Así, surgieron los pesos y contrapesos al poder, instituciones creadas con la rigurosa labor de mantener el equilibrio y la armonía de toda la nación. 

Esta separación de poderes, permitió así la participación masiva de las corrientes de pensamientos, ya que, aunque el poder ejecutivo sea ejercido por una persona, la Asamblea Nacional o Congreso, están compuestos por diferentes toldas políticas que, a su vez, están formadas por la misma sociedad civil, quienes deciden qué propuestas respaldar o no. 

Llegados a este punto, podemos comprender la importancia de los contrapesos del poder. Es por eso que, a pesar de encontrar muchos textos en diferentes fuentes acerca de las vulnerabilidades del equilibrio, el politólogo Moisés Naím y apremiado escritor. agrupó en su libro La Revancha de los Poderosos 3 indicadores más específicos que dejan al descubierto a los autócratas y, además, de una forma tan sencilla que todos seremos capaces de desarrollar un mejor criterio y colaborar como ciudadanos en los asuntos públicos. 

Populismo

El populismo, la polarización y la posverdad. Así clasificó Naím M. estos indicadores. El populismo, según la misma RAE es una "tendencia política que pretende atraerse a las clases populares", aclaro que no se refiere a izquierda, centro o derecha. El populismo es una forma de alcanzar el poder. 

Según Laclau E: 

Es todo proyecto político hegemónico aplicable a situaciones en las que existan demandas sociales insatisfechas. La articulación de esas demandas democráticas es el objetivo principal del líder populista. 

El populista identifica necesidades que no fueron tomadas en cuenta y las convierte en su principal arma de ataque, haciéndose creer merecedor del poder gracias a su supuesta e ineludible posición en defensa de los intereses comunes de "la mayoría".

Polarización

En segundo lugar, está la polarización, que proviene de las palabras polos, extremos, separación, quien busca arremeter el poder por medio de una brecha social, quien pretenda abrir más la herida existente entre los diferentes grupos, se podría decir que es otro indicador que le expone como un autócrata. En palabras del propio Moisés Naím:

La polarización elimina la posibilidad de las soluciones intermedias y obliga a todo el mundo y a todas las organizaciones a tomar partido. 

Este segundo indicador debe encender una alerta, ya que los líderes que polarizan, suelen responsabilizar a enemigos externos de los problemas graves que afronta la nación, excusándose de sus deberes y señalando a otros para atribuirle sus incompetencias.

Posverdad

Y, por último, y que actualmente están siendo bastante estudiadas sus implicaciones, tenemos la posverdad, cuyo significado no es más sino la mentira, la saturación de información, el sensacionalismo, las noticias falsas, los escándalos mediáticos y todo aquello que pueda enturbiar la objetividad de las informaciones por medio de cualquier tipo de medio de comunicación. 

El objetivo de la posverdad, indica Naím, "no es que se acepten las mentiras como verdades, sino enturbiar las aguas hasta hacer que sea difícil distinguir la diferencia entre la verdad y la falsedad." 

Es fácil compartir información por los diferentes medios y cada vez lo será con mayor eficacia, los filtros que pasaban antes las informaciones no se comparan a crear un perfil y comenzar a difundir contenido para intentar viralizarlo como se hace hoy día. 

Acciones ciudadanas para contrarrestar las tres "P"


Las tres P abarcan los principales indicadores para detectar a un autócrata que pretende alcanzar el poder y mantenerlo sin asumir la responsabilidad que este cargo conlleva.

Y, ¿Quién quiere que un autócrata Gobierne? Es por eso que, aunque es normal encontrar alguno de estos tres elementos en diferentes liderazgos, cuando están los tres presentes es cuando más alerta se debe estar. 

Cuando se concentran estas tres fuerzas, las instituciones democráticas se debilitan, la gerencia del país pasa a un segundo y tercer plano y se prioriza la influencia y las ventajas del poder para eliminar cuantos contrapesos les sea posible. Es por eso que, como ciudadanos, nuestro deber es anticiparnos, esto se podrá lograr mediante la objetividad y el raciocinio. 


Concluyo que, a pesar de los escenarios tan turbios que se han presentado los últimos años en torno a la geopolítica internacional, la mejor vacuna contra los autócratas es la participación y el involucramiento activo en los asuntos de interés nacional. Solo así se podrán recuperar los espacios perdidos en el terreno político a manos de los autócratas por culpa del desinterés de la sociedad hacia los asuntos públicos.

Aunque algunos políticos pretendan enturbiar las aguas con noticias falsas, las acciones ciudadanas en su contra permitirán que todos estén alertas para rechazar este tipo de candidaturas.


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